En el colegio Áleph le damos mucha importancia al rigor académico y a la disciplina, entendida que un conjunto de valores y comportamientos coherentes de todos los integrantes de la comunidad que convergen hacia el respeto mutuo, la vida armoniosa, el bien común y el sentido de comunidad. En ese contexto el logro de la autodisciplina de todos los componentes de la comunidad Áleph es un valor y objetivo central de nuestros quehaceres.
La existencia de una dupla de maestros por aula que acompañan continuamente a los alumnos y una pedagogía orientada al seguimiento individual de cada uno permite detectar rápidamente cualquier incidente de indisciplina y tratarlo de modo que los alumnos aprendan a regular su conducta respetando una armoniosa vida en comunidad.
La disciplina positiva se orienta a que los niños aprendan a auto regularse, ser cooperadores y responsables, a resolver sus problemas en un ambiente de respeto mutuo, generosidad y responsabilidad compartida. Cualquier conducta que atente contra la comunidad, compañeros y/o el mismo niño tendrá consecuencias conducentes a reflexionar y reparar. Y es en este último punto, en donde enfocamos nuestra mirada, en la REPARACIÓN, que no es una mera disculpa, sino que se profundiza en lo que el otro puede estar sintiendo.
Contamos con un protocolo de disciplina que permite que la escuela tenga una orientación y una línea clara para atender a toda la comunidad, pues finalmente es algo que nos compete a todos y no solo a los maestros. (Esto asociándolo a que muchas escuelas tienen una figura disciplinaria como regente o encargado de disciplina).